BLOM, KIRSTI; GABRIELSEN, GEIR WING
Un fulmar boreal surca los vientos, deslizándose grácilmente a poca distancia de las olas. Es un ave marina preparada para enfrentarse al frío y los vientos del océano abierto. La captura de hoy es muy colorida: engulle de un bocado unas delicias de color verde y amarillo brillante. Este precioso pájaro ignora que lo que acaba de ingerir no es comida de verdad, sino restos de plástico.
"Un mar de plásticos" explica cómo el océano, que alimenta a las aves marinas, se está convirtiendo en un vertedero. Cuando los científicos examinan los fulmares boreales muertos que llegan arrastrados por la corriente a las playas, encuentran residuos plasticos en sus estómagos. Lós pájaros suponen un aviso de que hay demasiado plástico en las aguas marinas. La buena noticia es que todas las personas, ya sea a nivel individual o en grupo, podemos ayudar al fulmar boreal y al resto de animales marinos. De hecho, ya hay gente en todo el mundo proponiedo soluciones ingeniosas para afrontar el problema de los residuos plásticos en el mar.