Stefan Zweig fue un gigante de la literatura del siglo xx, y aún hoy, ochenta años después de su muerte, son incontables los lectores que se sienten cautivados por sus obras. Con sus relatos eróticos y psicológicos, como Carta de una desconocida o Amok, sus incisivas biografías, como las de María Antonieta y María Estuardo, o sus excelentes retratos literarios de autores de la talla de Nietzsche y Casanova, el escritor austriaco se ha convertido en un indiscutible «clásico moderno».
Pese al hermetismo que mostró sobre sí mismo —incluso en su célebre autobiografía El mundo de ayer—, Zweig fue un hombre abierto, inquieto y curioso. Leal a sus amigos, se relacionó con los grandes autores de su tiempo: Rilke, Joseph Roth, Thomas Mann, H. G. Wells o Tagore lo trataron y apreciaron; Toscanini, Busoni o Bruno Walter le brindaron su amistad... Admiró a las personas de valía y vivió con pasión el mundo de la cultura de Occidente, porque creía que defendiéndolo llegaría antes la anhelada realidad de una Europa unida y sin fronteras.
Partiendo de testimonios de amigos y conocidos y de una ingente correspondencia epistolar, Luis Fernando Moreno Claros reconstruye con mano diestra e impecable estilo la trayectoria vital e intelectual de Stefan Zweig. Lo retrata en su complejidad —desde el descubrimiento de su vocación literaria en su adolescencia hasta el amargo final que lo llevaría al suicidio en 1942, exiliado de Europa— y comenta sus obras más famosas con gran conocimiento de la época en que se gestaron. Esto distingue a la presente biografía de otras y la convierte en una obra de referencia para cuantos deseen profundizar en los misterios y las revelaciones del genial escritor.