La trilogía de Nueva York se ha convertido por méritos propios en una de las obras más leídas y queridas por los lectores de Paul Auster gracias a su imaginativa mezcla de novela de misterio y metaficción, una originalísima vuelta de tuerca a las historias de detectives en el que lenguaje es el principal sospechoso. Cuando se cumple un año de la triste desaparición del escritor, por fin se hace realidad la esperada adaptación a novela gráfica de las tres historias que forma la trilogía, de la mano de tres artistas de consolidada carrera y reconocido prestigio como son David Mazzucchelli, encargado de ilustrar Ciudad de cristal; Lorenzo Mattotti, dibujante de Fantasmas, y Paul Karasik, que además de hacerse cargo de los lápices de La habitación cerrada es el cerebro detrás de las tres adaptaciones al lenguaje de la viñeta.
