En 1985, durante una terrible tormenta, tres jóvenes son brutalmente asesinados en un enorme cañón tirolés cutos fósiles cuentan la historia del mundo. Treinta años más tarde, el documentalista Jeremiah Salinger se instala en la pequeña localidad alpina y, a medida que va conociendo a los habitantes de la comunidad, se obsesiona con ese caso nunca resuelto. Nadie desea remover el pasado, como si aquel sangriento acontecimiento llevara consigo una maldición.