La señora Dalloway, la primera de las novelas con que Virginia Woolf revolucionó la narrativa de su tiempo, relata un día en la vida londinense de Clarissa, una dama de alta alcurnia casada con un diputado conservador y madre de una adolescente.
«Tal vez su obra maestra. Exquisita y soberbiamente construida.» E. M. Forster
