En esta ocasión, Lillebror se entera de que hay rumores sobre un tren fantasma que da vueltas por el bosque encantado y, como no se puede quedar de brazos cruzados, decide investigarlo. Cuando lo encuentra y se sube, resulta que queda atrapado. La maldición de este tren es que, una vez que te subes, no puedes bajar. Pero ¿de dónde sale exactamente esta maldición? ¿Y podrán Lillebror y todos sus compañeros de a bordo bajarse del tren en algún momento?