Kikí Dimulá (atenas, 1931) es sin duda la más grande poeta en activo de las letras griegas y una de las voces líricas más originales de la literatura internacional. Su compatriota, el poeta y escritor Nicos Dimu, va incluso más allá al calificarla "como la más grande poeta griega desde Safo". Y este puesto de honor lo ha logrado gracias a la frescura y originalidad de su obra, a la creación de un lenguaje provocativo y audaz, al uso de una sintaxis que parece romper con cualquier regla académica y a la configuración de un universo temático propio, en el que rescata y trasciende la cotidianidad por medio de un imaginario de fran riqueza. Es precisamente por esto y por la modernidad en la elección de sus temas por lo que su poesía resulta inimitable.