Presentación de la traducción al catalán de Una existència de paper, del poeta portugués Al Berto. Con Jordi Cerdà Subirachs, director de la Cátedra José Saramago del Instituto Camões de la UAB, y Elm Puig, traductor de la obra y poeta.
Organiza: Lleonard Muntaner Editor. Con el apoyo del Centro de Língua Portuguesa / Instituto Camões. Universitat Autònoma de Barcelona.
Al Berto (Coimbra, 1948 – Lisboa, 1997). Alberto Raposo Pidwell Tavares, más conocido cómo Al Berto —pseudónimo que permite el desdoblamiento de uno de los autores esenciales de la poesía portuguesa de la segunda mitad del siglo xx— pasa los años de infancia y adolescencia a la ciudad de Sines, a la costa del Alentejo. Posteriormente, emprende un periplo de juventud por Europa que empieza al establecerse en Bruselas, donde puede expresar con naturalidad su homosexualidad y evitar el servicio militar de su país. Solo vuelve a Portugal después de la Revolución de Abril, en 1974, y allá construye su carrera como escritor. Muere prematuramente, de cáncer, en Lisboa, a la edad de cuarenta y nueve años.
Poeta, pintor, instigador cultural y editor de vasta trayectoria y desenfreno vital, su escritura es un permanente juego autobiogràfic, una persecución de sombras entre su yo real y su yo poético —desbordando de amor carnal y huidizo, de angustia ante la muerte, de dolencia y fragilidad del cuerpo, de márgenes y de decadencia, de excesos y de pérdida— y está formada por una docena de libros de poesía, entre otras obras de prosa y teatro.
"Una existència de paper" es su primera obra traducida al catalán.
conec el cos que genera el seu propi foc
mentre la saba de l’arbre prepara la floració
i la darrera maduració dels fruits
el mil·lenari rovell de la nit
va ferir-li la parpella cansada per la visió
i a les malmeses espatlles encara carrega el desig
d’un altre cos oblidat vagament recordat
el mirall va esberlar-li el somriure
per una línia oberta a la pell s’escorre lívida
arran dels llavis silenciosos
la precària claror de la rosada
de la humitat antiga de l’ermitatge se n’alça
la prudència i la saviesa que va anar abandonant
a la laboriosa travessia de la vida
al lentíssim desxiframent de la por i dels senyals